Antologia 2014 de Poetes de l'Ebre. Mari Carmen Gómez

MARI CARMEN GÓMEZ SANZ

 
ZARAGOZA

Natural de Alcañiz (Teruel). Actualmente resido en Zaragoza. Desde niña escribo poesía. Estudié bachiller Superior en el Colegio la Inmaculada Concepción. Auxiliar Administrativo en la acade¬mia Logos de Alcañiz. He sido monitora de teatro en Alcañiz de niños. Domino la informática.
He leído como rapsoda en diferentes recitales. Pertenezco a la Asociación Aragonesa de Escri¬tores y a la Asociación Literaria Rey Fernando de Aragón.
He publicado el libro Poesía de Colores. He publicado poesías en varias páginas de Internet. He participado en varios programas de radio, recitando y  hablando de poesía.
Organizadora con María José Castejón de "Los Niños Versifican" y "Poesía De Mujeres". He recitado varias veces en el "Cabaret Poético"; recital de poesía y cuentos en la Sala De Conferencias en el C.C. Teodoro Sánchez Punter en Zaragoza; participación en "Palabras Al Atardecer" en la Expo de Zaragoza, Recital poético "Entre Dos Luces" en Calatayud. Colaboración en el libro "Poetas En La Red XI" y Poetas En La Red XII”

Mirándote a los ojos 

Mirándote a los ojos me inspiras un poema,
unas estrofas hilvanadas
acarician mis dedos.
Una piel suave, como terciopelo,
surge el deseo contenido.
El demonio de la carne acecha,
me dejo llevar, pierdo el sentido.
No sé luchar, cuando estoy contigo.

Hay amor en tus ojos, polvos de estrellas,
hay un regalo en tu mirada,
una ofrenda.
No te pido nada,
nada me ofrezcas.
Sabes que hoy no puedo colmar mi deseo,
larga espera en la estepa helada.
Reprimo mi amor,
me pierdo en la nada.

Leo poemas de amor

Leo poemas de amor y no dicen nada,
solo palabras vacías sin razón.
Será acaso que se me ausento el alma.
Amor, ese sentimiento extraño
que unos viven intenso y otros casi santo,
se aparta de mí con pasos agigantados.
No amo más, está ausente el deseo
la imperiosa necesidad del abrazo,
del beso tierno o apasionado.
No amo, permanezco absorta,
el amor se ha ausentado,
acaso no es estar un tanto muerta?
Huye despavorido, amor…
Aléjate de mí, estoy muriendo, sí,
pero quiero morir sin vergüenzas.
Morir oculta de ti.
Vete, amor, llena de esperanzas a otra,
no te compadezcas de mí.
Guarda tu misericordia en un bolso, amor,
deja que muera del todo mi esencia,
yo no sé de lloros, yo no sé fingir.

Maldito corazón

Maldito corazón.
¿Por qué me huyes?
Porque a mi lado no te quiero.
Dime, ¿qué te he hecho?
Robar mi libertad.
¿Cuándo hice eso?
Cuando el amor se apodero de mí.
¿Qué no salió bien?
¿Y tú me lo preguntas?
¿Por qué me culpas de lo que a ti te falta?
Fuerza y valor, para aprender en calma,
nada es eterno y nada se regala.
Pues todo tiene un precio.
¿Acaso tú no pagas?
Déjame, vete, maldito corazón,
no me engatusas con tus zalamerías,
no albergarás de nuevo mis sentimientos.
Ya no serás quien guíe mi camino,
ni el que consiga que se cambie mi destino.
Nací cobarde y así me quedaré,
si tú estás lejos apenas sufriré.

Tú no sabes amar

Tú no sabes amar, ¿acaso intentas
darme calor con tu mirada triste?
El amor nada vale sin tormentas,
¡sin tempestades... el amor no existe!
Y sin embargo, ¿dices que me amas?
No, no es el amor lo que hacia mí te mueve:
el Amor es un sol hecho de llamas,
y en los soles jamás cuaja la nieve.
¡El amor es volcán, es rayo, es lumbre,
y debe ser devorador, intenso,
debe ser huracán, debe ser cumbre...
debe alzarse hasta Dios como el incienso!
¿Pero tú piensas que el amor es frío?
¿Que ha de asomar en ojos siempre yertos?
¡Con tu anímico amor... anda, bien mío,
anda y ya basta de ser tan altanero!